Las expectativas son en verdad halagüeñas. Burgos es al día de hoy la única ciudad de Castilla y León cuyo censo de población mantiene una tendencia al alza. Por lo demás, concurren en ella tres elementos que la distinguen y la potencian: su ubicación estratégica, el empuje de los sectores industrial y comercial y la riqueza de su Patrimonio Cultural.
Actualmente Burgos se halla inmersa en un profundo proceso de transformación, tanto urbanística como turística y cultural. La modificación del trazado ferroviario, que ha dado lugar a la reordenación del tráfico en todo el centro urbano, junto a la creación de nuevas infraestructuras, como el Complejo de la Evolución Humana, obra del arquitecto cántabro Juan Navarro Baldeweg, han supuesto un cambio decisivo en la fisonomía de la ciudad. Burgos, que en la última década ha apostado fuerte por el turismo y la cultura, como lo demuestra el extraordinario crecimiento en la oferta de alojamientos y el considerable incremento de la oferta cultural, es hoy un referente internacional en el turismo de congresos e incentivos. A esto ha contribuido la apertura del Fórum Evolución, Palacio de Congresos y Auditorio, situado en el complejo de la Evolución Humana.
Burgos es una urbe moderna, pero sin agobios y sin prisas, cuajada de paseos, parques y jardines y en la que todavía reina la escala humana en la que fue concebida. Es un placer recorrer sus espacios verdes: los paseos de la Isla, el Espolón, la Quinta, el parque de Fuentes Blancas, que se articulan a lo largo del río que atraviesa la ciudad: el Arlanzón.